El camino del arte tiene tantas facetas y aspectos como trazos, colores, símbolos y
sensaciones desde la diversidad de artistas que lo ejercen.
Y cuando miro atrás, recuerdo las diversas etapas y momentos que tuve que pasar
para aprender a acercarme a él sin miedo, primero, sorpresa, después,
entusiasmo, permanente, para llegar a mi hoy de coleccionista definido y con
ganas de seguir aprendiendo con el arte y del arte.
Y si digo esto es, porque, los textos curatoriales que he leído en estos años de
convivencia con el arte me han crecido en su entendimiento, en el propio
conocimiento de los artistas y en la reafirmación hacia cada uno de los diversos
aspectos que acaban dando forma al universo artístico de Paraguay y del mundo.
Por eso, las emociones que las formas del arte de Eneide Boneu me estimulan y
me provocan, significan oportunidades de expansión de mi aprendizaje, sin
perder de vista quién soy: un coleccionista que ama el arte y sus diversas virtudes
para llegar hasta nosotros contribuyendo a nuestra propia percepción estética y
hacia las inquietudes que nos provoca.
Por eso los trazos, los colores, las manchas, los detalles de sus nuevas obras, hoy
presentes frente a ustedes, son no sólo los trazos históricos de su camino como
artista sino también un atisbo a su propia evolución como artista, como mujer,
esposa, madre y amiga.
José Daniel Nasta